La «Müllersches Volksbad» es una piscina cubierta además de una atracción turística. Esta joya de estilo modernista se encuentra muy cerca del museo Deutsches Museum y el centro cultural Gasteig, a orillas del Isar.
La Müllersches Volksbad, primera piscina cubierta pública de Múnich, abrió sus puertas en el año 1901. El arquitecto Carl Hocheder creó una impresionante piscina de estilo modernista-neobarroco que en el cambio de siglo era una de las piscinas cubiertas más modernas y grandes del mundo. Su construcción se inspira en los modelos de hammam o baños turcos y termas romanas. Los elementos decorativos barrocos, como las escaleras anchas, pinturas murales, estucos y estatuas de bronce, hacen del baño y la sauna una experiencia de alto nivel.
A pesar del lujo, hace más de un siglo quienes venían aquí a nadar no eran precisamente las clases más pudientes de la ciudad, sino todo lo contrario. La piscina toma el nombre de su fundador, el ingeniero Karl Müller, que se la regaló a la ciudad de Múnich con la condición de que fuera una piscina para la gente humilde.
Cuenta con dos vasos separados, que en origen debían mantener una estricta división entre mujeres y hombres. Actualmente, los visitantes pueden decidir libremente en cuál nadar. La más pequeña, originariamente la piscina de mujeres, tiene una temperatura algo más cálida y permite un baño relajante. En la más grande, la que al principio era la de los hombres, se puede nadar por las calles a una temperatura más apropiada para el deporte o tomar alguna de las clases de deportes acuáticos que se ofrecen.
A muchos muniqueses les gusta especialmente la Müllersches Volksbad por su extraordinaria sauna: la instalación cuenta desde sus inicios con un circuito de vapor romano-irlandés, con el que el cuerpo se calienta progresivamente en salas de aire caliente a distintas temperaturas (40, 60, 80° C). De acuerdo con la antigua cultura de la sudoración, el centro ofrece una sauna finlandesa con humidificación cada hora, así como un baño de vapor.
Aquellos a quienes el baño les haya dado hambre o sed pueden reponer fuerzas en el café-restaurante de la piscina Müllersches Volksbad, también de estilo modernista